Una vez reglamentado servirá para "proteger y fomentar" las presentaciones en vivo. Se otorgarán estímulos para los artistas y subsidios, créditos y exenciones impositivas a los "clubes de música", establecimientos que ofrecen conciertos con una capacidad máxima de trescientos espectadores.
La medida contempla contener a una serie de establecimientos que luego del incendio de Cromañón se enfrentaron con difíciles condiciones para continuar ofreciendo shows.
La crisis del sector provocó el cierres de varios lugares como el Bar Tuñón, el Café Homero, el Club del Vino, Pigmalión, la Peña del Abasto y una de las sedes de la Peña del Colorado, además de El Nacional de San Telmo.
Ahora los locales comprendidos en el plan de salvataje serán eximidos del pago del impuesto sobre los Ingresos Brutos, la contribución por publicidad y del ABL. Para ello deberán presentar una propuesta de programación que cubra "un mínimo de nueve meses en el año con por lo menos cuatro funciones en distintos días y en horarios centrales".
La noticia llegó luego de que los representantes de los clubes iniciaran una serie de actividades orientadas a concientizar a la opinión pública acerca de su situación.
El proyecto fue votado por los 48 legisladores presentes en el recinto, y tuvo el respaldo del Sindicato Argentino de Músicos (Sadem), representantes de la Asociación Argentina de Intérpretes, la Sociedad Argentina de Autores y Compositores (Sadaic), Argentores y la Cámara de Música en Vivo.